En este módulo, voy a lanzarte unos tips para que tus apuntes te sean útiles. Y cómo hacerlos tanto en clase como en casa.
En clase:
- No desconectes, escucha. La toma de apuntes favorece la concentración y la posterior memorización de los conceptos. No dejes escapar esta oportunidad. Tienes que estar en clase, pues aprovecha ese tiempo.
- Atiende a lo que tu profesor@ comenta y anótalo, no solo es importante lo que se escribe en la pizarra. A veces, es casi más importante lo que no se escribe en ella. En las aclaraciones muchas veces se da información casi más importante y, por suerte, a veces también se les escapa alguna pregunta del examen.
- Resalta lo que no entiendas para preguntarlo una vez finalice la explicación. No te lleves dudas para casa.
En casa:
- Pasa a limpio los apuntes de clase, a ser posible el mismo día de la clase.
- Elabora tus propios formularios, esquemas, mapas, flash cards…
- Las notas de clase puedes complementarlas posteriormente con las de tus compañer@s o compartirlas si tienes un grupo de estudio serio y así mejorarás mucho tus apuntes.
- Ten siempre a mano tu libreta de dudas, apunta todas las que surjan y así no olvidarás resolverlas.
- Haz los deberes lo antes posible, mejorará la comprensión del tema y la ejecución de los mismos, pero si los dejas, se olvidarán.
Hablando de deberes, cuando te pongas a hacer ejercicios en casa ten en cuenta lo siguiente:
1.- LEE con tranquilidad los enunciados. Sobre todo, presta atención a que la pregunta que te plantean quede correctamente contestada.
Sobre todo, en problemas, ves leyendo las frases poco a poco y sacando los datos y las incógnitas de cada una de ellas. Anota todos los datos clave que te aportan.
2.- DIBUJA. Esto es algo que siempre te voy a recomendar y es que, aunque no lo creas, el ojo ayuda a la mente. Así que, cualquier cosa que puedas aportar al problema, un esquema, un dibujo, diagrama… te va a ayudar notablemente a simplificar el ejercicio, facilitar su comprensión y resolución.
3.- Usa tu CREATIVIDAD. Piensa qué herramientas pueden ayudarte, aplícalas, juega. Si es algo muy general, llévatelo a tu terreno, busca una situación parecida y más cercana. ¡Y si te equivocas, genial! Los errores, como ya has visto, son una de las mejores herramientas de aprendizaje
4.- RAZONA todo lo que haces. Escribe todo el proceso que sigues hasta llegar al resultado y trata de hacerlo de forma limpia y ordenada, con claridad y usando el lenguaje matemático que conozcas.
5.- CONTRASTA tus soluciones. Revisa que todo lo que has hecho tenga sentido, que sea coherente y comprueba, en la medida de lo posible, que la solución obtenida sea válida y que contesta a la pregunta que te hacen en el ejercicio.